En los años 80 en la capital británica comenzó una locura por el arte callejero. Cada vez más graffiti comenzaron a aparecer en las calles: de lo frívolo a lo serio, de lo puramente decorativo a lo político.
Las fotos de esta colección fueron tomadas en Londres en 1985-1986 y reflejan los problemas y aspiraciones que el pueblo británico vivía entonces. Algunos de estos murales todavía existen, aunque están muy descoloridos. Y en las fotos de los años 80, siguen siendo jugosas y brillantes.