Un erizo sin agujas necesita un masaje regular para sobrevivir

Ya hace mucho frío afuera y cada día hay menos luz. Imagina lo difícil que sería para el pequeño erizo Nelson en el bosque. Los erizos generalmente tienen alrededor de 500 agujas en sus cuerpos, que los protegen de los depredadores y los ayudan a mantenerse calientes. Pero Nelson, que lleva el nombre de un almirante inglés, es completamente calvo. Debido a esto, tiene que vivir en interiores. Todos los días, voluntarios de la organización de bienestar animal Foxy Lodge Wildlife Rescue le dan un masaje a Nelson.

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Fuente: Daily Mail

Según los expertos, el problema de la calvicie de erizo es una enfermedad genética. El animal es cuidado con exfoliantes antisépticos y masajes con aceite para bebés.

Tonya y John Garner retienen a Nelson en un centro de rescate en Norfolk. Esperan que al erizo le vuelvan a crecer agujas, pero si esto no sucede, el refugio continuará cuidándolo. No debe ser liberado en la naturaleza, porque las agujas son su única protección.

Esta no es la primera vez que los voluntarios encuentran un erizo calvo. En 2009, un erizo llamado Baldrick con una enfermedad similar apareció en el refugio Foxy Lodge, pero murió poco después. Un año después, encontraron un erizo calvo Betty, que pesaba solo 124 gramos, y ahora ha alcanzado un peso saludable de 317 gramos.

Los Garner fundaron el centro de rescate hace ocho años con donaciones de familiares y amigos. Desde entonces, han estado rescatando y cuidando a cientos de animales y aves cada año. Según sus estimaciones, a finales de 2016, esta cifra superará el millar.

El 20 de octubre, la pareja recibió un reconocimiento por su trabajo caritativo en forma de premio, que les fue entregado en la Cámara de los Lores del Parlamento británico. "Sin una pasión compartida por ayudar a los animales, no hubiéramos podido continuar este trabajo. A veces puede ser difícil, pero vale la pena todo el esfuerzo cuando ves a un animal recuperado que abandona el refugio y recupera la libertad", dice Tonya Garner.

"Solo apoyamos a todos estos animales que de otra manera no tendrían una segunda oportunidad de vida", agrega el dueño del refugio.