No hay muchas manos: un médico canadiense ha ideado una almohada para dormir saludablemente en el avión
Un médico deportivo canadiense ha creado una súper almohada para dormir en un avión (y no solo). Puede "recuperarse" y dormir bien por la noche, sentado en cualquier posición incómoda.
Todo el mundo conoce las almohadas inflables y suaves para dormir durante los viajes, pero el inventor de esta mano de dibujos animados fue más allá y creó un mecanismo flexible y al mismo tiempo bastante elástico que se puede fijar fácilmente en una posición cómoda, exactamente en la que es cómodo descansar.
Fuente: Daily MailEl médico deportivo canadiense Sylvain Berube decidió facilitar el sueño de los pasajeros aéreos con su invento, presentando la almohada MonPere original: larga y flexible, termina con dos grandes y suaves "palmas" que se asemejan a las patas del personaje de Sesame Street.
La almohada para abrazar está hecha de silicona duradera pero suave y se encuentra dentro de una funda de algodón que es fácil de quitar y lavar. La estructura se puede plegar en una bola compacta, empacada en una bolsa de viaje. Las patas de dibujos animados son fáciles de doblar, envuelven los asientos con ellas y se adaptan a su gusto. Y que tal flexibilidad no sea engañosa: los desarrolladores de MonPere aseguran que esta almohada proporciona suficiente soporte para la cabeza en casi cualquier posición.
El canadiense lanzó una startup en la plataforma Kickstarter. Su idea fue apreciada, y ya ha logrado recaudar alrededor de 112 mil dólares para lanzar la almohada a la producción, aunque inicialmente solo necesitaba 35 mil.
Una almohada inusual parece susurrar: "Confía en mí."
El brazo de la almohada está diseñado para apoyar la postura correcta durante el sueño. Basta con fijar un extremo en el asiento y colocar el otro donde deben estar la cabeza y el cuello. Además, el MonPere se puede usar para instalar tabletas o teléfonos inteligentes al ver videos, así como para envolver "manos" de dibujos animados flexibles como cinturón de seguridad para soporte adicional.
Según el inventor, la almohada no solo ayuda a conciliar el sueño sentado y proporciona un descanso completo, sino que también previene el dolor de espalda y también reduce el riesgo de ataques cardíacos después de un largo viaje.
Antes de lanzar la almohada a la producción, Berube la desarrolló y probó durante cuatro años. Según él, la forma de las palmas no es psicológica, sino puramente práctica: probó la almohada en diferentes formas, y esta resultó ser la más práctica y cómoda.
Como admitió el propio inventor de la almohada grande, pasó muchos años viajando y volando alrededor del mundo, pero con solo mirar cómo sufría su hija, incapaz de conciliar el sueño en un incómodo asiento de avión, pensó en crear un dispositivo que pudiera facilitar el sueño a los viajeros.