La fotógrafa británica Danielle Reader decidió descubrir la influencia de la ropa en el estilo del maestro. Implementó la idea en el proyecto Traveling Dress Collective, invitando a 11 fotógrafos de diferentes partes del Reino Unido.
El proyecto solo tenía dos limitaciones: cada fotógrafo tenía un vestido para solo cinco días y no se podía mojar debido a la tela muy delicada. Los maestros recibieron plena libertad de expresión, podían trabajar en cualquier estilo, creando diferentes imágenes. Como resultado, han resultado historias completamente diferentes, en las que el vestido juega lejos del primer papel.
Admire las sesiones de fotos del mismo vestido tomadas por fotógrafos del Reino Unido.
En una sesión de fotos de Danny Reader de Somerset, el vestido fue decorado por un aristócrata
Gerry Hill de Lancaster creó una serie de retratos
La historia de la actriz en las imágenes de Chantal Storrs-Barbora de Camberley
En manos de la fotógrafa Andrea Bradley de Llanelli, el vestido recibió un color emocional
Con Rebecca Challis de New Malden, el vestido se convirtió en un símbolo de las vacaciones de verano y la libertad
Himno de la maternidad por la fotógrafa Elora Viano de Lincoln
Los valores familiares y la comodidad en el hogar en el trabajo de Joe Haycock de Caldicock
En la sesión de fotos de Sofia Benhok de Portsmouth, el vestido se volvió dinámico y sin peso
Con Francesca Lowe de Chelmsford, el vestido fue decorado por un hada del bosque
Una historia retro contada por Lauren Shepherd de Aberdeenshire
Ashley Shea de Orpington vio el vestido como un símbolo de alegría y vitalidad