¿Todos se despertaron el lunes?
Knocker-up o Knocker-up es una profesión olvidada en Inglaterra e Irlanda, que consistía en despertar a la gente para el trabajo. Se originó durante la Revolución Industrial y existió hasta los años 20 del siglo 20.
Principalmente usaban palos de bambú largos, bastones, bastones, pero a veces, para despertar a los residentes de los pisos superiores, disparaban guisantes a las ventanas. La mayoría de las personas mayores trabajaban como aldabas, pero a veces, por una remuneración adicional, este trabajo se confiaba al agente local.
Mary Smith ganaba seis peniques a la semana disparando guisantes de un tubo a las ventanas de trabajadores dormidos.