En la primavera de este año, se restableció repentinamente en Lituania el servicio militar obligatorio. El 11 de mayo, utilizando un generador de números aleatorios, se compiló una lista de hombres de 19 a 28 años que se convirtieron en conscriptos. En total, 37.000 personas fueron llamadas al servicio militar, algunas de ellas voluntarias. Tal “lotería” causó emociones tanto positivas como negativas entre el público. Vale la pena señalar que no a todos los representantes masculinos seleccionados les gustó el servicio militar, quienes, a su vez, enfrentaron la condena de otros ciudadanos. Fueron llamados "cobardes" y "no hombres".
A raíz de la discusión general sobre el tema, los fotógrafos Beata Tyshkevich-Khasanova y Neringa Ryakashyute crearon un proyecto. Los maestros mostraron las emociones ocultas de los hombres, mostrándolos llorando. Según los autores del proyecto, las lágrimas de ninguna manera humillan al sexo fuerte, sino que solo demuestran la capacidad de sentir y experimentar.