Navegado: Los turistas británicos se fueron de juerga en Chipre y terminaron en Siria
Tres fiesteros británicos se encontraron inesperadamente cerca de una zona de guerra en Siria, abordando accidentalmente el barco equivocado después de una noche de club en Chipre. Lewis Ellis, de 25 años, Alex McCormick, de 19, y James Wallman, de 23, pensaron que estaban en un viaje en bote para observar delfines, pero terminaron en un barco de transporte que seguía la ruta Ayia Napa—Tartus.
Los muchachos no tenían idea de a dónde iban hasta la mitad del Mediterráneo. Cuando habían navegado unos 160 km, se preguntaron por qué la costa estaba tan lejos, y se dieron cuenta de que habían abordado el barco equivocado.
(6 fotos en total)
La leyenda "terminó en Siria" con el hashtag " la noche en Ayia Napa salió mal."
Cuando aterrizaron en Tartus, que se encuentra a unos 80 km de Homs, devastada por la guerra, se encontraron con la asombrada policía militar estacionada para proteger la base naval rusa.
"Cansado, con resaca, la historia más extraña de mi vida."
Lewis Ellis dijo: "El último club cerró a las 7:30 de la mañana, solo esperamos nuestro viaje en bote durante 9 horas y terminamos en el bote equivocado. Estábamos en pantalones cortos, con resaca, y parecía que estábamos listos para una fiesta en el barco. Esta es la historia más idiota del mundo, ¿verdad? Nadamos para ver a los malditos delfines, y terminamos en la puta Siria."
"El barco del Diablo."
Al darse cuenta de la difícil situación en la que se encontraban, entraron en pánico, dice Alex McCormick. "Después de largas horas, nos encontramos en este lugar y pensamos:" ¿Qué demonios, dónde estamos?”».
Tres amigos se dieron cuenta de que habían abordado el barco equivocado, en medio de la ruta a través del mar Mediterráneo.
Al principio, se les dijo al feliz trío que se quedaran en el barco, y algún tiempo después fueron llevados a la base rusa. Los amigos con resaca aún no entendían dónde estaban hasta que uno de ellos logró hacer una publicación en Facebook que identificaba su ubicación.
Lograron regresar a Chipre, pero la madre de uno de los jóvenes ingleses no estaba entusiasmada con tales aventuras de su hijo.
Alex McCormick dice que el traductor literalmente rodó por el suelo de risa cuando le explicaron lo que había sucedido. El martes, los británicos que se habían ido de juerga regresaron a Chipre, pero el viaje repentino no agradó en absoluto a la madre de Alex, de 19 años.
Cuando los muchachos atracaron en Tartus, que se encuentra a unos 80 km de Homs, devastada por la guerra (en la foto), fueron recibidos por la policía militar estacionada para proteger la base militar rusa.
El puerto de Tartus es una de las pocas salidas de Siria al mar Mediterráneo. Durante el conflicto armado en Siria, que comenzó en 2011, cientos de miles de personas murieron.
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