Muchas aerolíneas están tratando de hacer que nuestro viaje sea lo más cómodo posible. Pero hay factores que no dependen de ellos de ninguna manera. No es fácil para ninguna persona pasar varias horas en el espacio confinado de un avión en una silla que no siempre es cómoda. Y si tiene personas en sus vecinos que, por ejemplo, no tienen idea del espacio personal o de algunas reglas elementales de comportamiento en lugares públicos, esos viajes se convierten en una verdadera prueba de nervios y paciencia.
Aquí hay algunos ejemplos de personas que, por su propio placer, llevan al resto de los pasajeros al calor blanco: parece perfectamente normal que se cambien de ropa, se corten las uñas, expongan los pies al público, lejos de la primera frescura. ¿Alguna vez te has encontrado con vecinos similares?
Fuente: boredpanda.com
Un vecino inesperado.
Sí, y los hay.
Los niños a menudo se aburren durante el vuelo.
No se espera una visualización agradable de la película.
Deja que una mascota salga a caminar.
Sí, son calzoncillos de hombre.
El caso cuando un vecino no sabe nada sobre el espacio personal.
"Simplemente decidió ocupar mi mesa con sus dos computadoras portátiles."
Cuando un vecino no solo ronca durante el vuelo, sino que también huele a ajo.
Cuidado con las uñas voladoras.
Probablemente, no valía la pena beber medio litro del cazador.