En caso de que no lo supieras, en Japón, el uso de alimentos falsos está bastante extendido. El propósito principal que sirve es proporcionar a los extranjeros una representación visual del plato que están considerando ordenar. Esto les permite anticipar cómo se verá su comida, lo que ayuda a cerrar cualquier brecha cultural o de idioma que pueda existir.
Artistas como Noriko Watanabe son la razón por la que existe la comida falsa. Su fascinación por el arte de la elaboración de alimentos falsos comenzó en su infancia. Las muestras de alimentos meticulosamente detalladas que se exhiben en los escaparates de los restaurantes nunca dejaban de intrigarla, tan cautivada por estas representaciones realistas que se embarcó en un viaje personal para dominar el oficio.