La imaginación humana es ilimitada. Gracias a él nacen esculturas únicas que desafían la lógica y contradicen las leyes de la física. Flotan sin esfuerzo por el aire, cuelgan peligrosamente boca abajo o se apoyan en misteriosos trucos técnicos. Es difícil imaginar cuánto trabajo, talento y escrupulosidad hay en cada uno de estos trabajos.
Escultura de la serie “Fuerza de la Naturaleza”, Lorenzo Quinn, Madrid, España. "La piedra de equilibrio", Adrian Gray, Reino Unido. “Peculiaridades de la gravedad para el elefante”, Daniel Firman, París, Francia. Esculturas en equilibrio de Jerzy Kędzior, Emiratos Árabes Unidos. Esculturas en madera de Tom Eckert. Trans Ī Re, Fredrik Raddum, Oslo, Noruega. Escultura “Van Gogh” de la serie “El viajero solitario”, Bruno Catalano, Francia. "La broma al policía", Tom Franzen, Bruselas, Bélgica. “Ventana con escalera”, Leandro Erlich, Bretaña, Francia. “La jugada final”, Leandro Erlich, Francia. “Las muchachas de Apeldoorn”, Elisabeth Stienstra, Holanda. “Ahorcado”, Menashe Kadishman, Israel. "Toma mi relámpago, pero no toques mi trueno", Alex Chinneck, Londres. "Tranquilízate" de Alex Chinneck, Londres. Wurf VI, Anna Borgmann y Candy Lenk, Berlín. "Máquinas" de Jerry Jude. "Michael Jones" de Jerzy Kędzier. "Piedra Voladora", Smaban Abbas, El Cairo, Egipto. Abedo, Emil Alzamora, Perú. "Wire Fairies", Robin Wright, Reino Unido. "Beso de café", Johnson Tsang, Hong Kong. Libro Cascadas de la serie de esculturas “Biografías”, Alicia Martín, Madrid, España.