Al mirar estas viejas imágenes, se podría pensar que las personas del pasado carecían por completo del instinto de autoconservación. De hecho, la mayoría de ellos son profesionales y artistas de circo que pueden hacer cosas con sus cuerpos que una persona común nunca soñaría. Cargas enormes, alturas vertiginosas y saltos suicidas: la humanidad ha estado haciendo todo esto durante mucho tiempo. Por supuesto, surge la pregunta: ¿por qué? La respuesta es simple. En todo momento, la gente ha querido pan y circos.