"Daddy Long Legs": el transporte más extraño de la época victoriana
La época victoriana todavía fascina a la gente hoy en día. Y ni siquiera se trata de romance y moda espectacular. En ese momento, el mundo estaba cambiando rápidamente y el progreso tecnológico avanzaba a pasos agigantados. Aparecieron inventos cuya realidad es difícil de creer. Al mismo tiempo, no se quedaron en el papel, sino que se implementaron y utilizaron con éxito. El tranvía marítimo "Daddy Long Legs" es una creación típica de su época, que no tuvo análogos ni en su época ni posteriormente.
La idea de crear un tranvía que se desplazara sobre el agua perteneció al ingeniero Magnus Volk. A finales del siglo XIX, la vida de los británicos se volvió tan rápida que los métodos tradicionales de viajar por tierra y mar no eran adecuados para todos. Los empresarios, oficinistas, comerciantes y simplemente viajeros valoraban la velocidad y la accesibilidad en el transporte.
La ciudad costera de Brighton, en el sur de Gran Bretaña, ha tenido durante siglos un grave problema de comunicación con el pueblo vecino de Rottingdean. El ferrocarril terminó en Brighton y luego comenzaron los problemas. Los asentamientos estaban separados por un terreno muy accidentado, donde la colocación de raíles era difícil y muy costosa. Por tanto, la ruta más sencilla y corta era la ruta marítima.
La gente navegaba a lo largo de la costa en barcos, yates y lanchas, confiando en el viento y la potencia de los remos o las máquinas de vapor. Magnus Volk decidió ampliar la ruta ferroviaria hasta Rottingdean añadiendo una línea de tranvía. Pero no tenía que pasar por colinas y tierras bajas pantanosas, sino a lo largo del mar, a lo largo de la costa.
El proyecto del ingeniero se llamó Brighton and Rottingdean Coastal Electric Tram. Se trataba de un vehículo único en su género: un híbrido de tranvía y ferry. El vagón, impulsado por un motor eléctrico, debía desplazarse sobre rieles colocados en el fondo del mar.
El tranvía se llamó "Pioneer", pero inmediatamente recibió el nombre no oficial de "Daddy Long Legs" ("Daddy Long Legs"). Este es un apodo popular en inglés para un artrópodo, al que erróneamente consideramos una araña y lo llamamos “haymaker” o “scraper”. ¿Por qué? Es simple, debido a la obvia similitud externa.
En 1894, se colocaron rieles a lo largo del fondo del mar para el Pioneer a una distancia de 50 a 90 metros de la orilla. La longitud de la carretera era impresionante y ascendía a 4,5 km. Daddy Long Legs partió de un muelle especialmente construido en Brighton y viajó a un muelle similar en Rottingdean. En el punto final se construyó una central eléctrica para el vehículo y se tendieron cables a lo largo de soportes a lo largo de todo el recorrido.
Pero lo más sorprendente de este proyecto fue el propio Pioneer. Era un vagón parecido a un tranvía, pero más espacioso. Lo subieron a una plataforma que, a su vez, se colocó sobre soportes altos. Cuatro “patas” de siete metros de largo descansaban cada una sobre su propio carro con 4 ruedas de ferrocarril. “Daddy Long Legs” fue propulsado por dos motores eléctricos que producían 25 caballos de fuerza cada uno.
El vagón Pioneer tenía capacidad para 150 pasajeros. Estaban ubicados en la cabina, en su techo y también en la plataforma. A pesar de que "Daddy Long Legs" estaba clasificado como transporte ferroviario, estaba equipado como un barco marítimo. El vehículo estaba equipado con aros salvavidas, botes salvavidas y una campana de barco. Además, el tranvía emprendió su viaje bajo bandera británica, como corresponde a un barco.
Los largos soportes permitieron que el tranvía costero cruzara el mar tanto con marea alta como baja. Sin embargo, pronto surgió un serio inconveniente. En aguas bajas, el Pioneer desarrolló una buena velocidad, pero durante la marea alta apenas podía arrastrarse. El tranvía avanzaba a la velocidad de una marcha, lo que irritó a muchos. El tiempo de viaje variaba considerablemente y los pasajeros ni siquiera podían soñar con el horario exacto.
El Pioneer realizó su primer viaje en noviembre de 1896. Estuvo navegando durante una semana hasta que sufrió un grave accidente. Una noche se desató una tormenta y el tranvía que estaba parado en el muelle fue arrastrado por el viento. El viento y las olas lo arrastraron por los rieles hacia el mar, tras lo cual la plataforma se volcó. El Pioneer fue remolcado a la orilla, le restauraron y extendieron las patas. En el verano de 1897 empezó a navegar de nuevo entre los muelles de Brighton y Rottingdean.
Todo estuvo bien hasta 1900, cuando empezaron a construir nuevos rompeolas en Brighton. Para ello, los rieles Daddy Long Legs tuvieron que alejarse aún más de la orilla. Esto les pareció demasiado costoso a las autoridades y tuvieron que elegir entre el tranvía acuático y la seguridad de la costa. Esto último resultó ser una prioridad y en 1901 se desmantelaron parte de las rutas submarinas.
El tranvía ya no podía funcionar y se estaba oxidando en el muelle. En 1910, ésta y parte de la carretera fueron cortadas en chatarra y vendidas a empresarios alemanes. Hoy en día, sólo las traviesas de hormigón nos recuerdan este vehículo único de la época victoriana. Se pueden ver en alta mar durante la marea baja.